Morillon, una empresa familiar desde hace cinco generaciones, siempre ha sabido adaptarse a las necesidades del mercado. Nuestras bases son sólidas, y están profundamente arraigadas en nuestro territorio. Fundada en 1865 en Andrezé, un pequeño pueblo rural de la región de Les Mauges, nuestra empresa y su fábrica de 4.000 m2 siguen, 150 años después, radicadas en este mismo pueblo, que en la actualidad se ha convertido en un municipio delegado de Beaupréau-en-Mauges.
Orgullosos de nuestra tierra y de nuestras raíces, nuestra privilegiada ubicación en el oeste de Francia, en pleno centro del triángulo Nantes – Angers – Cholet, y a tres horas y media de París, se enmarca en un territorio dinámico donde florece la economía. «Tierra de armonía, hombres de energía» es una máxima que hemos tomado prestada –y no en vano–, a Les Mauges y a la zona de Cholet. La riqueza de nuestra empresa se basa en estos dos pilares, requisitos previos necesarios para nuestra vocación internacional.
En la actualidad, Morillon exporta a más de 80 países; un 80% de su facturación se produce en el ámbito internacional; y aplica una estrategia dirigida a garantizarse un puesto entre los líderes mundiales del sector de la extracción de productos a granel. Aspiramos a la gama alta y a la excelencia. Nuestro propósito es seguir desarrollándonos y equipar a clientes de todo el mundo con extractores, en busca de la eficacia y la exigencia.
Ante todo, el capital humano es la propia esencia de nuestra empresa, y estamos comprometidos a preservarlo. Morillon, empresa familiar por definición, cree ardientemente en los valores humanos, y desea ofrecer a sus cincuenta empleados el marco y los medios necesarios para que todos ellos puedan desarrollarse profesionalmente.
Las claves del éxito de nuestro proyecto son el bienestar en el trabajo, la comunicación, el progreso, el apoyo y la formación de todos nuestros empleados.
Por lo que se refiere a los clientes, nuestra prioridad es su completa satisfacción. Escuchamos sus necesidades y prestamos especial atención a la calidad del contacto y a los vínculos que deseamos entablar con ellos.
Este espíritu es el mismo en lo referente a los proveedores, con los que llevamos trabajando muchos años. Nuestra filosofía manifiesta, y totalmente asumida, es construir una colaboración de larga duración, el 60% de ellos se encuentra a menos de 30 km de nuestra empresa.
Estamos cerca de nuestros clientes y de nuestros proveedores –a los que consideramos colaboradores–, y nuestra voluntad es instaurar una relación de confianza.